Gracias a la vida

Derechito, respirando y trabajando.

Desde hace un par de semanas cuando me preguntan que como estoy les contesto –“Derechito, respirando y trabajando”.

¿Que, porque?- Bueno  a mi juicio, pararse erguido, caminar  sin ayuda  a paso vivo, respirar  sin sufrir de cansancio y simultáneamentetrabajar es una  bendición.

Me llevo mucho tiempo en llegar a esta conclusión y solo pude entenderlo después de haberlo experimentado durante  una crisis de salud que me mantuvo hospitalizado durante casi un mes.

¿Que, que fue lo que tuve?, eso no importa mucho, basta con decir que no fue el corazón  y que gracias a la misericordia del señor no tengo una enfermedad terminal, ya que por especificaciones  de fabrica estoy hecho de ese tipo de hierba  que no agarra fuego y que cuesta que se muera.

Pero la razón por la que estoy escribiendo esto no es para  hacerlos llorar con mi infortunio, estoy seguro que suficientes problemas tienen  ustedes  como para estar perdiendo su tiempo oyendo mis miserias.

La  causa de que este vivo se debe a que Dios aun  no ha decidido llevarme, el me rodeo de médicos, enfermeras y demás personal en los cuales el mayor elogio  se vuele insuficiente. Son personas plenas de eficiencia, caridad y solidaridad.

Cuando un medico trata un paciente, se convierte en la punta de un iceberg, que en su mayor parte esta  compuesto por  enfermeras, técnicos, ordenanzas, personal de limpieza  quienes además de ejercer su trabajo de manera efectiva y eficiente, se vuelven concejeros, amigos, consoladores,entregándose  mas allá de lo natural, haciendo que el enfermo se sienta protegido, abrigado, resguardado  de la enfermedad.

Viví la experiencia más inquietante de mi vida, y estoy satisfecho de  haberla superado;  me hizo experimentar situaciones  conmovedoras ubicadas en el contexto más básico de lavida misma.

Desde el punto de vista medico lo que puedo  asegurar es que si cuidamos nuestro corazón, y  controlamos todos los factores de riesgo en caso de presentar una enfermedad grave  tendremos mas posibilidades de salvar nuestra vida.

Como medico esta prueba  a la que fui sometido me ha permitido, reafirmar  que la medicina no solo es ciencia, que los medicamentos y la tecnología son una parte  de la  curación del paciente, ya que este necesita ser apoyado y reconfortado de manera continua; que la visita del medico es insuficiente,  y es allí donde aparecen esos  ángeles  que cuidan al paciente las 24 horas  del día, dando una palabra de aliento, consolándolo cuando  afloja en su pelea contra la enfermedad. Algo que descubrí fue, que la actitud del paciente ante la crisis   determina el tiempo de convalecencia.

El apoyo familiar es determinante  durante  la crisis, ya que el enfermo se enfrenta ante una situación  que no puede controlar y que usualmente le produce malestar Pero  la ansiedad se acentúa mas cuando coincide que el paciente es medico, pertenece a una familia de médicos, conoce  la enfermedad y sus complicaciones. Deahí el dicho que reza “el que nada sabe, nada teme”. Sin  ánimo de jactarme y sin ser pretencioso,las atenciones yel apoyo proporcionado por mi esposa fue determinante en mi recuperación.

La enfermedad llegara a nuestra vida, si cuidamos nuestros órganos, tendremos mas posibilidades de  recuperarnos. En cuanto a mi persona estimados amigos:“¿Morirme yo? Eso será lo ultimo que haga!!”