Siguiendo la costumbre de visitar el cementerio el día de los difuntos, como cada 2 de Noviembre, me topé con la cruda realidad de la existencia: una madre visitando la tumba de su hijo, sufre un paro cardiaco y muere súbitamente. La historia me la relato uno de los tantos visitantes que fueron testigos del suceso, yo solo vi una sábana blanca que protegía el cuerpo en espera de la visita obligatoria de medicina legal.
Muerte súbita es un episodio en el que la persona afectada pierde el pulso , la respiración y la conciencia de manera repentina e inesperada, secundario a una causa natural, dentro de las 24 horas de iniciados los síntomas (Sin que participen mecanismos violentos , es decir homicidio, suicidio, intoxicación, trauma) y de la cual solo podría recuperarse si se efectúan las maniobras medicas adecuadas.
La muerte súbita es la primera causa de muerte en todo el mundo, Estados Unido sufre alrededor de 500000 casos al año, es decir 1 caso cada minuto, en nuestro país carecemos de este tipo de estadísticas.
La muerte súbita tiene su origen en el aparato cardio vascular. Cualquier tipo de alteración de la función del corazón , ya sea secundaria a un Infarto Agudo del Miocardio, agrandamiento del corazón de diversas causas, una válvula cardiaca alterada, inflamación del musculo cardiaco ( Miocarditis) o anormalidades genéticas que afecten el corazón pueden causar la muerte súbita.
Este grupo de accidentes son los que originan comentarios de allegados: “pero porque, si todo estaba bien”. Si se examina la historia familiar de estos pacientes, encontramos frecuentemente antecedentes similares en hermanos, tíos, primos y otros familiares que murieron de manera repentina, inesperada y natural.
Morir es un negocio que todos vamos a hacer, pero no ahora si no que: “hay despuesito”. Es que acaso: ¿se puede prevenir la muerte súbita?, la repuesta es si, pero tomando este SI como un estilo de vida, que nos proporcione además una buena calidad de vida.
Se debe tomar conciencia sobre lo necesario de cambiar estilos de vida poco saludables como el fumado, el sobrepeso y el sedentarismo. Comamos sano consumamos pescado al menos 3 veces a la semana.
Pero, ¿y si fracasa la dieta, el ejercicio y de todas maneras me da el infarto y se me para el corazón?
En ese caso tengamos presente que si se presenta un paro cardiaco súbito, en el 80% de los casos, son los familiares, amigos o colegas de trabajo quienes tendrán que realizar las maniobras para atender esta emergencia.
En ese caso debemos de preguntarnos? que tan preparados están ellos para atenderme si tengo una emergencia de este tipo?
Esta es la razón que me lleva afirmar que todos debemos estar preparados para aplicar este tipo de maniobras, y sobre todo me refiero a la población no medica que podría tener en sus manos nuestra vida. Además es mandatorio incluir en este tipo de adiestramiento el uso del Desfibrilador Automático Externo, medida salvadora reconocida por la comunidad médica mundial.
La muerte súbita es un problema de salud que afecta atletas de alto rendimiento como hemos sido testigos recientemente, con los jugadores de futbol. Para prevenir de manera efectiva la muerte súbita, debemos de adoptar hábitos de vida saludables, hacernos examinar por un médico, y entrenar a la comunidad en general en técnicas de reanimación dirigidas a salvar vidas. Así como se cuenta con extinguidores para incendios, debemos de contar con desfibriladores en la vecindad de los lugares donde muy pronto podría ocurrir un paro cardiaco y para todos una muerte natural.
A propósito la vida continuo igual, me retire del lugar notando que a escasos 5 metros del cuerpo una niña le pedía a su padre con insistencia le comprara una bolsa de papas fritas.